La más famosa de estas historias es la leyenda de “Gladbury”, en el sur de Inglaterra. La historia cuenta que cada 25 años un ángel visita al fabricante de velas local y toca una de sus velas. Quien las encienda será testigo de un milagro en Nochebuena.
Pero con el auge de la Era Eléctrica en 1890, esta leyenda centenaria podría llegar a su fin. Cuando el joven ministro progresista David Richmond (Hans Matheson) llega a Gladbury, los habitantes del pueblo descubren una nueva fórmula para conseguir milagros: la caridad y la beneficencia. En su afán por modernizar el pueblo, choca con el viejo fabricante de velas y encuentra una inesperada aliada en la escéptica Emily Barstow (Samantha Barks). Y por si no hubiera suficientes motivos de discusión, la vela, que es importante para mucha gente del pueblo, desaparece en caso de accidente.
“The Christmas Candle”, dirigida por Corin Hardy (“The Hallow”), se abre con un impresionante prólogo que establece lo que parece una historia navideña victoriana ordinaria, pero que rápidamente se convierte en algo mucho más místico.
